Por fin va a tener solución uno de los problemas que más agobiaba a la gente bienpensante de este país. Los funcionarios podrán seguir apurando las horas de sueño, como hasta ahora, pero sin que su productividad laboral se vea menoscabada ni lo más mínimo.
Lo explica Fichalater Sudokudoer, presidente de la Comisión Técnica del Ministerio de Tapeo. “Vamos a colocar unas máquinas del tiempo en las entrada de los principales ministerios. Cuando los funcionarios lleguen a la hora que estimen, tras haber visto la tele y dormido lo que sus cuerpos les pedían y, por tanto, descansadísimos y con unas ganas tremendas de trabajar, serán transportados hasta las 8 de la mañana del día en curso, hora en la que ficharán y se irán al bar de la esquina a tomar el primer desayuno. Confiamos en que, así, la productividad aumentará y, sobre todo, el ambiente en los centros de trabajo será mucho más distendido”.
Cómo no, en Coalición Carpetovetónica, el principal partido de la oposición, están de uñas. “Ya veréis cómo fichan, y a continuación se transportan a la partida de mus del domingo anterior, o a esas vacaciones en Levante en que, por una vez, ligaron”, brama Babieca Lanzaenristre, portavoz del partido para asuntos funcionariales. “Este gasto no va a reportar ningún beneficio al contribuyente y, además, las máquinas son feísimas”.
Veremos cómo acaba la cosa, pero, entre tanto, las obras de instalación de las máquinas están provocando el caos circulatorio en Madrid, y los ministerios están tan desapacibles que los funcionarios se están cogiendo bajas en masa.