Increíble, pero cierto. La señorita Nancy Holycrow, natural de una aldea de Minnesotta, perdió la virginidad en una fiesta, y la encontró en un contenedor de reciclado de papel. “Menos mal”, se justifica la joven, “que siempre miro los recipientes para papel, por si alguien hubiera tirado una biblia que pudiera ser usadas por la congregación”.
Nancy no se explica cómo pudo acabar su virginidad en un contenedor de papel. “Es cierto que en la fiesta había muchos chicos, pero nos pasamos la noche cantando canciones de High School Musical, nada más. Sólo se me ocurre que se nos fuera la mano con la zarzaparrilla”. A lo que sigue unas risitas la mar de irritantes.
Las autoridades religiosas de Minnesotta están que no caben de sí de la alegría. “Se ha demostrado, una vez más, la pureza de las jóvenes de la comunidad”, se jacta el reverendo Aloyssious Stormwind. “Es una pena que las jóvenes a las que les ocurriera una cosa semejante no miraran en los contenedores de papel, seguro que más de una habría llegado intacta al matrimonio”.
Las autoridades, en cambio, niegan categóricamente haber reciclado más virginidades.
1 comentario:
jajaja... tio, escribe a la competencia del mundo today, a ver si te fichan :)..
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